‘PEACEMAKER’: REVIEW

Hace solo un año desde que, con WandaVision, Marvel Studios comenzó a hacer series conectadas directamente con sus películas. A pesar de ello ya habían habido otras, como Agents of SHIELD o Daredevil, aunque lo cierto es que no existía una retroalimentación entre cine y televisión y su conexión quedaba limitada a simples referencias del universo en el que se encuentran los Vengadores. Lo que pasaba en el cine importaba, en mayor o menor medida, en las series, pero lo que pasaba en las series no importaba en el cine. El caso de DC en televisión ha sido distinto, apoyándose desde el inicio de Arrow hace ya una década en el multiverso, las series y las películas siempre han estado claramente separadas perteneciendo a universos distintos. Esto cambiará con Peacemaker (El Pacificador), serie que se estrena mundialmente en HBO Max este jueves 13 de enero y que será la primera serie de DC perteneciente al universo de sus películas, el llamado DCEU o DC Extended Universe.

Peacemaker tiene lugar tras los eventos de The Suicide Squad (2021), con el peculiar justiciero siendo reclutado por ARGUS para una nueva misión. De primeras, un cambio que llama la atención es el de la personalidad del protagonista, ya que mientras que en la cinta de James Gunn era un personaje que caía algo antipático, en la serie es más querible que en su primera aparición, nos reímos más con él y, lo más importante, se le entiende. Se crea una empatía que no existía previamente y que va creciendo a lo largo de los episodios a la vez que se muestra una evolución en el personaje a pesar de mantener siempre una personalidad de fanático conspiranoico a lo QAnon.

Junto al regreso de John Cena en el papel protagonista también nos reencontramos con dos personajes que conocimos en la película, Emilia Harcourt (Jennifer Holland) y John Economos (Steve Agee), que formarán equipo con Peacemaker junto a dos nuevos personajes, Clemson Murn (Chukwudi Iwuji) y Leota Adebayo (Danielle Brooks).  Este nuevo grupo es formado para llevar a cabo el «Proyecto Mariposa», una misión en la que deben asesinar a todas aquellas personas que han sido identificadas como “mariposas” -incluido un senador de los Estados Unidos- a pesar de que el significado de esa denominación es algo que no todos los miembros del equipo conocen. Otro personaje presentado en la serie es Adrian Chase (Freddie Stroma), un joven con la identidad secreta de Vigilante que lucha contra el crimen y por la paz al igual que su mayor ídolo y ejemplo a seguir, Peacemaker. La mejor forma de describir a Vigilante es como si Deadpool se hubiera dado un golpe en la cabeza de pequeño. Es tontísimo, está como una cabra y es de lo mejor de la serie. Cada escena en la que sale roba la pantalla y cada vez que habla logra sacar una carcajada.

Mientras que estos son los aliados del protagonista, la serie cuenta con varios antagonistas tanto para Peacemaker como para el grupo. En lo que respecta al justiciero, la relación con su padre Auggie (Robert Patrick) será uno de los principales arcos de la temporada. Auggie cuenta con grandes conocimientos tecnológicos, siendo quien fabrica a Peacemaker sus diferentes artefactos, pero sin embargo el hecho de ser un supremacista blanco hace que choque constantemente con su hijo. Otros antagonistas serán la propia policía, en concreto los agentes Fitzgibbon (Lochlyn Munro) y Song (Annie Chang), que irán tras la pista de los crímenes (cometidos por la paz) del protagonista. Por último, los villanos principales son los “mariposas”, un grupo de individuos que no solo suponen una amenaza para el equipo sino también para el mundo entero. Esta presencia de varios villanos hace la serie más entretenida, porque cuando parece que se han librado de un problema, aparece inmediatamente otro.

Peacemaker es una serie muy divertida, aunque también cuenta con un grado de violencia considerablemente alto. Se puede comparar a varias series, por ejemplo a The Boys, que también es una serie que no se corta un pelo al enseñar sangre y vísceras, aunque creo que la serie de Amazon es un drama con toques cómicos, mientras que Peacemaker es totalmente una comedia al igual que lo era The Suicide Squad. Curiosamente, creo que la serie que más se acerca al tono de Peacemaker es otra serie de DC emitida en HBO Max, Harley Quinn, que a pesar de ser de animación cuenta con muchos elementos que coinciden con la serie protagonizada por John Cena: un grupo de inadaptados que forman un equipo, humor constante, violencia extrema, y constantes referencias al universo DC.

Este último aspecto está muy presente, habiendo incluso referencias a héroes y villanos que todavía no han aparecido de forma ‘live-action’ pero que cuya mención sacará una sonrisa a los espectadores más fans a los cómics. Peacemaker es una serie que intenta recordar constantemente que se encuentra en el DCEU, se habla mucho de Batman o Wonder Woman aunque nunca los vayamos a ver en la serie. Esto recuerda a las difuntas series de Marvel en Netflix, las cuales hacían de vez en cuando referencias a los Vengadores o la batalla de Nueva York pero iban totalmente por libre. Por ello, Peacemaker es una serie que funciona mejor individualmente que como parte de un universo mayor. Con una banda sonora a ritmo de rock y un maravilloso opening que no podrás evitar ver y escuchar en bucle, Peacemaker es una serie gamberra con un gran sentido del humor y que va de menos a más, apoyándose en unos personajes carismáticos y en una trama muy interesante, con giros inesperados, y muy divertida. El inicio del DCEU en las series no ha podido ser mejor.

NOTA DE LA TEMPORADA: 8/10