Chicago Fire 3×05 – The Nuclear Option (SPOILERS)
Anteriormente en Chicago Fire…
Dawson se estrenó como candidata; el exprometido de Brett se pasó por la 51; Severide es la reina del drama.
Capítulo 4DS y esto cada vez es menos emocionante, precisamente gracias a Severide y sus dramas.
Que me parece muy bien que esté depre por la muerte de Shay (todos lo estamos), pero basta ya, que lleva cinco capítulos aprovechándose de esa excusa para aburrirnos con sus borracheras (y todavía no lo hemos visto en el chachipiso Dawsey). Y ahora encima, se lleva a Connie con él a beber y propone a los del Escuadrón irse el finde a Las Vegas, con casinos y furcias, como diría Bender.
Y desde luego, no sé qué se trae con Brett (¿a alguien más le dio la impresión de que su ex tuvo algo que ver con el robo en su casa?).
No estoy segura de si se la quiere tirar porque le recuerda a Shay, o si sólo quiere convertirse en su mejor amigo porque le recuerda a Shay. Sea lo que sea, por favor, que lo decida pronto.
Al menos volvimos a ver a Platt por ahí cuando Mouch fue a visitarla para intentar que le quitara de encima las multas del Molly’s II.
También vimos a Ruzek, que se encargó de investigar al cuñado de Casey, un tío la mar de majo que finge tener problemas financieros y que le está poniendo los cuernos a su mujer. Por cierto, otra trama que no tenía otro propósito más que aburrirnos.
¿Ahora es cuando, después de la amenaza de Casey, le pasará algo a Jim y el bombero queda como sospechoso? Porque esto ha pasado ya. Cuatro veces. O cinco, quién las cuenta.
En la ronda rápida de cosas que también han pasado, tenemos a Otis lleno de orgullo y satisfacción por poder por fin conducir el camión y con ganas de presumir de ello delante de sus sobrinos, a Boden consiguiendo que le levanten la suspensión a Cruz para que vuelva a conducir, a PeterMills y Brett enfrentándose a un zombie en calzoncillos, y a Herrmann metiéndose en un ascensor parado entre dos plantas para rescatar a las cinco o seis personas que había dentro. Sin duda fue más interesante lo del ascensor que lo del incendio en aquel edificio con el cable atascado en la polea de Dawson.
Hablando de…
Probablemente lo mejor del capítulo haya sido Dawson y su manía de dejarse la puerta del compartimento del camión abierta y lo mucho que eso molesta a Herrmann.
Me encantó cómo al final Dawson reconoce que lo estaba haciendo a posta porque quería que la tratasen como tratarían a cualquier otro candidato. Me ha gustado mucho la relación Dawson-Herrmann de estos dos últimos capítulos, y cómo ambos se apoyan mutuamente, Dawson sabiendo que puede aprender mucho de Herrmann, y él sabiendo que tiene potencial para llegar a ser una gran bombero.
Ahora que falta poco para el parón, ¿con quién creéis que nos dejarán el cliffhanger, con Dawson o con Severide?
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